Friday, December 19, 2008

Ciclos

No hay mejor predictor del futuro, que el pasado. Y eso cobra especial relevancia cunado hablamos de estos ciclos en los que los seres humanos nos basamos tanto: los años. Tenemos cierta fascinación por contar días, guardar en nuestra memoria fechas, y celebrar cada que se cumple un nuevo ciclo anual.

Además estos ciclos nos hacen desear el nuevo día, porque éste será aún más cercano al que cierra nuestro ciclo, al que añoramos y al que nos dice lo lograste, llegaste hasta hoy

Yo soy de las que piensan que si uno quiere cambiar puede elegir un jueves de febrero igual que un 31 de Diciembre. Pero también, creo que vale la pena aprovechar una fecha característica para sentarte a pensar lo bueno que paso a través de un ciclo y lo que deseas y esperas para otro. Para mí, la fecha clásica para esta actividad es mi cumpleaños. Quizás porque lo siento un poco más privado y más mío, pero aprovecho para mirar detenidamente y desde afuera lo que ha sido mi vida, para cambiar el rumbo si es necesario o apretar a fondo el acelerador para cumplir mis metas.

Para otros, la época en que lo hacen es ésta. Y a pesar de que puede ser un invento mercadotécnico, lo recibo con los brazos abiertos, porque se que todo aquello que nos provoque a ser mejores y a revalorarnos es bueno y es bienvenido. Si al final del balance lo que obtenemos son deseos sinceros de ser mejores seres humanos, la navidad y lo que realmente significa, habrá valido la pena.

Y recordé una buena manera de expresarlo con una escena de la película de Pokemón -creo que fue la uno- donde muere Ash Ketchum y todos los pokemón buenos sobre la tierra lloran por la gran pérdida. Toda esa energía positiva que se formó de sus lágrimas (sumadas también a que tienen poderes superiores e ideas revolucionarias) hacen que vuelva a la vida.

Y así, los seres humanos al decidir ser mejores en una misma época podemos lograr un milagro. Y no pretendo milagros sobrenaturales, sólo el pequeño de compartir nuestras bendiciones y de agradecerlas día a día. La vida es un ciclo, y ya lo dice Lou Reed, you are going to reap just what you sow... elijamos una fecha, un lugar, un instante para sembrar lo que queremos en un futuro cosechar.