Monday, July 09, 2007

Achtung

Cuando miro mi blog me doy cuenta que es un reflejo de mi cabecita y mis pensamientos . No sigo una secuencia lógica en mis entradas, hablo de todo y de nada a la vez. Tengo días planeando escribir sobre La boda, y no me ha dado tiempo de pensar bien qué quiero decir (porque no hago un borrador previo).

La introducción fue sólo para dar a entender que no hablaré sobre nada personal en esta ocasión, le pasó a un amigo de un amigo (y esta vez sí es real).

Hace unos meses Abel iba hacia el hospital porque tenía un dolor que le estaba dando lata desde varios días atrás, cuando chocó. Fue a revisión y regresó a su casa. Su hermana horas más tarde tuvo que llevarlo nuevamente al hospital porque tenía una hemorragía.

El diagnóstico fue cáncer, y desde entonces ha estado entre médicos y estancias en hospitales cada vez, según me cuentan, más débil.

Hasta aqui la historía me asustó, Abel es una persona de no más de treinta años, estudiante de doctorado con una vida aparentemente sana. Muchas de las personas que yo conozco tienen esta apariencia y el pensar que la juventud no es sinónimo de salud me da miedo.

Pero Abel tenía más detrás de él. El viernes nos enteramos que tiene sida. Cáncer y SIDA, debe ser muy difícil para una persona lidiar con esas dos enfermedades que de solo escucharlas nos recorre un escalofrío por todo el cuerpo.

Abel fue muy cruel e irresponsable, él sabía que tenía SIDA e hizo su vida normal, sin tomar las precauciones necesarias para no contagiar a alguien más con la enfermedad. Con todas sus letras, tenía relaciones sexuales sin protección.

La cuestión para una persona como yo -bastante conservadora al menos en lo que a variedad de parejas respecta- es realmente alarmante, no tenía una sola pareja y era bisexual.

Cuando las personas con quienes tuvo relaciones se enteraron de lo que les había hecho obviamente se enojaron. Su mejor amiga lo perdonó -creo que no hubiera podido hacerlo de no ser porque las pruebas reflejaron que ella no está infectada de SIDA-

Es doloroso ver como una persona tiene ese nivel de egoísmo, como se suicida lentamente y busca arrastrar con él a quien pueda; sin importarle siquiera si es su mejor amiga.

Se los cuento para que tomen de la historia la moraleja que para ustedes aplique mejor. A mi me deja pensando en si no podemos confiar en nadie, ni en nuetro mejor amigo. Sé, y no quiero por esta historia cambiar, que tengo mis deditos de una mano llenos con personas en las que puedo confiar enteramente... pero aún así trataré de no olvidarla.

Por Abel, ojalá Dios pueda perdonarlo, y le permita vivir en paz.

No comments: